A primera vista, podría parecer que este tema sería algo más apropiado en la prensa popular. Sin embargo, según nuestra experiencia, se trata de una cuestión que enfrenta a un número sorprendentemente grande de navegantes. Cuándo o dónde hacerlo, para que nadie oiga... básicamente, ¿cómo se enfrenta la gente al deseo de hacer el amor en un barco cuando no son los únicos a bordo?
Basándonos en nuestras propias experiencias, hemos dividido a los marineros en varias categorías en función de cómo abordan el tema de hacer el amor en el mar.
Losbuscadores de emociones
Estos marineros están en un barco para disfrutar, sin restricciones. Y lo harán en todos los lugares que puedan. Cuando vayas al baño por la noche, te encontrarás con ellos disfrutando de placeres íntimos en el salón y a menudo dejarán la puerta de su camarote abierta, sin importar lo que estén haciendo dentro. Básicamente, no querrás estar con este tipo de personas en un barco a menos que seas uno de ellos.
Los fugitivos
Incluso antes de que el barco esté bien atado al muelle, saltan a tierra y se escabullen para hacer el amor en la arboleda más cercana, la playa desierta o el cementerio local. Al volver de su "paseo", se puede observar su aspecto ligeramente desaliñado, tal vez con alguna ramita o aguja de pino adornando su pelo.
Los amantes del
movimientoEstas personas se divierten en todo tipo de posturas, que es precisamente la razón por la que hacen el amor a bordo. Cuanto más se inclina el barco, más se aprovecha la gravedad para el placer.
Los amantes del aire
librePor la noche, se escabullen por encima de la embarcación o en la bañera para disfrutar del romanticismo que proporcionan las estrellas, el mar y el reflejo de la luna. Pero no podemos culparlos. Al fin y al cabo, ¡el romance está en todas partes en el mar!
Los amantes del
aguaSe bañan con sorprendente frecuencia y se muestran muy pegajosos en el agua. Pero no es una forma indecente de hacer el amor. Es relativamente inofensivo, los implicados cuentan con unas condiciones higiénicas perfectas y pueden matar tres pájaros de un tiro: hacer el amor, bañarse y hacer un poco de ejercicio. En el fondo, es todo un reto.
Los inocentes
Desde fuera, parece que no se les derretiría la mantequilla en la boca, pero en cuanto están a puerta cerrada empiezan a emanar ruidos extraños pero familiares, que dejan bastante claro a todo el mundo lo que está pasando. Después, actúan como si no hubiera pasado nada y, desde luego, nunca lo mencionan.
Los que se avergüenzan fácilmente
Incluso en un barco, a veces encontrarás personas que simplemente se avergüenzan de cualquier cosa sexual, aunque no se puede ocultar todo a bordo de un barco. No quieren cambiarse delante de los demás y guardan estrictamente su intimidad en el camarote. Hacer el amor a bordo es un completo tabú para ellos o se dedican a hacer el amor con sumo cuidado. Y ¡ay de los que accidentalmente pisan su camarote!
¿Cuáles son nuestros consejos para hacer el amor en un barco?
- Intenta limitarte y no avergonzar a los demás en la medida de lo posible. Que tu vida sexual se exhiba en el salón va a poner sin duda a la gente en una situación incómoda.
- No seas demasiado insistente. Puede que tu pareja esté cansada de capitanear todo el día o que haga tanto calor que simplemente no esté de humor. Las cosas son diferentes en un barco y hay que enfocarlo así.
- Preste atención a las cuestiones de higiene y seguridad . Nadie quiere tener que visitar al médico después de sus vacaciones. No es la mejor idea hacer el amor cuando has estado una semana entera sin ducharte o estás con vientos huracanados.
- Disfruta del ambiente romántico . No es difícil. Por la noche, el romanticismo está presente en el mar. Pero evita las velas, porque arriesgarse a un incendio a bordo no merece la pena.
- Y ahora un consejo para los más atrevidos. ¿Has estado alguna vez en una fiesta de intercambio de parejas? ¿Qué tal un crucero swinger?
