Irlanda es un país tan específico y conocido que no necesita presentación. La isla, situada en el noroeste de Europa, le ofrecerá experiencias que no encontrará en ningún otro lugar del mundo. Diríjase aquí para celebrar el Día de San Patricio, por ejemplo, o simplemente para disfrutar del whisky de primera calidad y la cerveza negra de la que los irlandeses no se cansan. El agreste paisaje se ha convertido en el hogar de algunas personas rudas, pero confíe en que le recibirán con los brazos abiertos.
Dos ríos, un canal, dos mundos
Aquí la geografía se une a la historia. Uno de los destinos de crucero más populares de Europa, la magnífica vía fluvial Shannon-Erne es el lugar donde confluyen dos ríos: el Shannon de la República de Irlanda y el Erne de Irlanda del Norte. Emerald Star, la empresa hermana de Le Boat, lleva más de 40 años ayudando a sus clientes a descubrir el placer de las vacaciones en barco. También es la razón por la que puede disfrutar de la ruta de 63 kilómetros de la isla, que cuenta con 16 esclusas y 34 puentes.
Si toma el Shannon hacia el sur, básicamente viajará en el tiempo. Aprenderá datos interesantes sobre la historia del país, que está salpicado de castillos centenarios y restos arquitectónicos históricos.
Al norte, en cambio, el Erne se abre a un paisaje típicamente irlandés repleto de pueblos de piedra. La bien llamada Isla Esmeralda es el destino perfecto tanto para los principiantes como para los navegantes más experimentados.
¿Cómo podría ser su crucero por Irlanda? Eche un vistazo:
¿Quién disfrutará de unas vacaciones en una casa flotante en Irlanda?
- Pescadores. Los ríos y lagos locales están repletos de salmones, lucios y percas. Es un paraíso para los que tienen cañas de pescar.
- Golfistas. Los greens de las orillas están esperando a que supere su propio hándicap para relajarse por fin en el hoyo 19.
- Ciclistas. Sí, descubrir los tesoros ocultos de los pueblos y ciudades que bordean las vías fluviales es recomendable en bicicleta.
- Aficionados a la historia. Antiguos castillos, imponentes mansiones, hermosos parques e impresionantes complejos monasteriales le esperan para ser explorados.
- Los más tranquilos. Olvídese del bullicio en Irlanda. La campiña circundante y el omnipresente color verde le tranquilizarán perfectamente.
- Observador. La naturaleza le entretendrá en la isla; no olvide sus prismáticos para no perderse nada ni a nadie.
